Para que nuestro consumo no se vuelva rutinario o medio fome, podemos dar ese toque lúdico con algunos juegos muy simples y que son ideales para disfrutar con un buen grupo de amigos. ¡Acá van algunas ideas!
En esta vida siempre hay que ponerle un poco de creatividad y diversión a todo lo que hacemos, y cuando se trata de consumir marihuana, esto también se puede aplicar mediante algunos juegos muy simples y prácticos, ideales para jugar con buenos amigos. Acá te damos algunas ideas.
El submarino
Este juego es muy simple. Se trata de fumar marihuana en un lugar donde no se escape el humo. Puede ser en un sitio cerrado, debajo de una mesa tapada con un mantel. Claro que se recomienda que este juego no dure más de 20 minutos para no ahogarse.
Dados
Agarras un dado cualquier y lo lanzas, entonces aspiras la cantidad de segundos, sin botar el humo, el número de veces que aparece señalado en el dado. Al toser, vuelves a lanzar el dado.
Adivine, buen adivinador
Otra idea es por ejemplo colocar un tema, ejemplo, frutas. Una persona tiene que pensar en una determinada fruta y la otra, la tiene que adivinar. Puedes agregar al juego, algunas pistas. Si la persona adivina, puede ser poseedor del porro y fumarlo una vez.
El sabio
Otro juego puede ser el poner un tema, por ejemplo, 5 países que comiencen con la letra A. La persona debe decir estos 5 países sin titubear, se pone un tiempo máximo para poder decirlas. Si se dice se fuma la marihuana, y si no, se pasa al siguiente jugador.
El que lo sabe, fume
Otro juego de conocimiento. Se puede usar, colocando el comienzo de una canción, quien pueda cantar la canción, tiene el derecho de fumar la marihuana.
Trivia marihuana
También se pueden probar los conocimientos que las personas tengan acerca del cannabis. Se pueden crear tarjetas con verdadero o falso. Por ejemplo: la marihuana sirve para el cuidado del cabello, ¿verdadero o falso? Y si la persona contesta y acierta, se gana el porro.
Las escondidas con malicia
Nunca es malo volver a recordar esos tiempos en que uno era niño y disfrutaba de cosas tan simples como jugar a las escondidas. Bueno, puedes volver a ese lugar tan feliz como adulto y de la mano de la marihuana. Hay que esconderse y quien no logre ser pillado, se gana el premio mayor: ¡la marihuana!